En el marco del Día Mundial del Malbec, Alberto Arizu (h), CEO y cuarta generación de Bodega Luigi Bosca y ex Presidente de Wines of Argentina, realiza un recorrido histórico de la variedad.
La etapa de vendimia, que dio inicio hace algunas semanas en nuestras fincas de Luján de Cuyo y Valle de Uco, aguarda expectante el capítulo de la cosecha de tintos.
Este es el lugar donde los aromas frescos y las esencias frutales se entrelazan con la maestría viticultora, creando experiencias sensoriales que deleitan los sentidos.
Los vinos rosados, con sus tonalidades que van de los pálidos y delicados a los intensos tonos ruborizados, son una manifestación fascinante de la diversidad en el mundo de la vitivinicultura.
En los últimos tiempos, los vinos blancos han experimentado un notable avance en su presencia en las estanterías y mesas de Argentina.
El arte de la viticultura se entrelaza con las sutilezas del clima en dimensiones que van más allá de lo que uno puede imaginarse.
A medida que los días avanzan, nos aproximamos al momento más especial del año: la vendimia, que marca el fin de un arduo ciclo de doce meses en el cultivo de la vid.
Es por eso, que es importante conocer las cualidades de los tres tipos de vinos ideales para la temporada estival: blancos, rosados y tintos ligeros.
Los últimos días de 2023 nos invitan a reflexionar sobre el año que despedimos, mirar hacia atrás para ver qué objetivos cumplimos y plantearnos qué desafíos y metas tendremos a futuro.
Por sus burbujas finas, su elegancia, su acidez pronunciada y su frescura, en los últimos años se instalaron entre los consumidores como ejemplares perfectos para acompañar todas las instancias de una comida.
